jueves, 17 de enero de 2013

XVI

Domingo, Octubre 26, 2008
 
La noticia pues me cayo de peso..de mucho peso, así que me salí al pasillo, me senté en una banca y no me contuve llore como hacia mucho no había llorado, no fue intencional , solo paso…y de pronto, tal como suelen llegar, ahí estaba frente a mi viéndome con una especie de curiosidad que solo los ojos de los niños pueden reflejar

-¿Tu también estas enfermo?- fue entonces cuando note lo brillantes que estaban sus ojos y que no había un indicio de cabello en su cabeza, no se bien si le respondí con un pequeño asentimiento de cabeza, o si pronuncie un si en muy baja voz, solo se que me seque las lagrimas, por alguna razón no quería que ese niño me viese llorando, el verlo calvo y en el área de oncología no me dejo lugar a dudas que el también sabia lo que el cáncer es…fue entonces que se acerco a mi violando todas las leyes que hablan del espacio vital, o del acercamiento social..Busco mis ojos y me dijo con una sonrisa imposible en alguien que no tenga inocencia

-No llores, el pelo se te cae pero te va a volver a salir-

Los ojos se rellenaron de lagrimas , para cuando me limpie las lagrimas para quitar lo borroso de mi vista ya no vi a ese niño, a ese niño que no se si estaba ahí por accidente o porque tenia que estar

Por eso no me gustan los niños, porque desaparecen antes de que uno averigüe por que están parados frente a nosotros.

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